Autor vs palomitas. Lo que ha traído «Roma»

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Muchas veces me he referido a la muy extendida idea de que la ficción es sólo para disfrutar, porque para tristezas ya está la vida misma. Y bien, nada qué objetar. Cada cual escoge entre la gran telaraña de textos, películas, series y hasta teatro, aquello que más estimula su disparador emocional.

El problema viene cuando en los cines sólo se ven películas que estimulan el disparador emocional con historias calcadas, o tan parecidas, que se convierten en un género de por sí, ya sea por los taquillazos −ya todo el mundo los “malconoce” como blockbusters− o las historias excesivamente melodramáticas −da igual si orientadas al drama o a la comedia− que rayan los inverosímil.

Una de las satisfacciones más reconfortantes que he tenido en los últimos años mientras termino mi tesis de doctorado sobre técnicas literarias en el cine, y que me ha obligado a leer montones de libros sobre realización cinematográfica y escritura de guiones, ha sido encontrar unos pocos fieles seguidores de un director tan complejo como Yorgos Lanthimos. Este cineasta griego tiene una forma de hacerte revolucionar el cerebro con un cine tan polémico e inquietante como casi roza la perfección técnica y argumental; y despierta pasiones tan encontradas como ser considerado un maestro de la pantalla grande para unos y una verdadera plasta para otros.

Si algo me satisface en este marasmo creado entre el cine de autor y los taquillazos es que Roma, más allá del gozo aportado por una obra maestra en forma de película, esté en boca de todos, para bien y para mal, y que trae al debate público la necesidad del buen y mal cine y su forma de distribución.

Esto se estaba comentando por lo bajo, pero seguía ahogado en ese clisé que conocemos como grito sordo. Para nadie es un secreto que Netflix, Amazon, Hulu, etc; están cambiando el cine. ¿Para bien o para mal? Esta es la cuestión.

Ha habido en los grandes premios internacionales una especie de guerra encubierta de las grandes distribuidoras de cine por marginar las ficciones realizadas por estas plataformas, ya sea en los estrenos o en los premios. ¿Por qué? Porque les quitan público, porque el que puede pagar una cantidad mensual para ver todo el cine que pueda en su casa, deja de ir al cine. Este es mi caso.

Pero decir que si dejo de ir al cine perjudico al mismo cine es una simplificación de un fenómeno más profundo. La pregunta es: ¿merece ir siempre, a toda costa, sin discriminar, al cine y dejar de ver lo que hacen Netflix y familia? Para los que amamos un tipo de cine diferente a los grandes taquillazos y las películas planas no hay discusión.

Yo entiendo el problema general. No es culpa de las grandes distribuidoras si la mayor parte del público tiene la teoría del “Voy al cine a divertirme, para sufrir ya tengo la vida”. Si quieres ir a cine a comer palomitas mientras ríes, eso te darán, y no es una crítica; es una lógica que se impone en el mundo actual.

El problema llega cuando los que queremos otro tipo de cine, miramos la cartelera y no nos queda otro remedio que sentarnos en la butaca de casa viendo las plataformas como Netflix y Amazon, porque no nos interesan ni combates entre superhombres ni lagrimitas o sonrisitas enlatadas.

Alfonso Cuarón ha traído el debate con su cine y con su postura. Ya antes había dicho que “el cine se ha ahuevonado” y ahora nos dice ante la pregunta de un periodista:

“¿Cuántos cines crees que proyectarían una película mexicana en blanco y negro? ¿Rodada en español y mixteco? ¿Que además es un drama sin ninguna gran estrella? ¿Cómo de grande crees que sería su estreno en el circuito convencional de distribución?”[1]

La pregunta no es baladí y nos trae de vuelta a lo que inicia este texto: ¿Vas a al cine sólo a disfrutar o también a que un filme te obligue a ejercitar las neuronas? Mi respuesta ya la tienes, ¿cuál es la tuya?

[1] Variety, «Alfonso Cuaron rips into journalist asking why #Roma came from Netflix #GoldenGlobes https://bit.ly/2LV9DOf pic.twitter.com/Yr27EYqD85», Tweet, @Variety, 2019T5:00, https://twitter.com/Variety/status/1082124733934522368.

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