Premio Nobel. La feria de los despropósitos

blankTenía veintitantos años cuando le dije a un amigo que aspiraba a ganarme un día el premio Nobel de literatura. Claro, se echó a reír en mi cara y con el tiempo le tuve que dar la razón porque parecía algo inalcanzable.

Cada día que pasa no lo parece tanto. Ya no es tan imposible que un día cualquier nombre desconocido o persona que no haya hecho nada para la obtención del nobel aparezca en sus listas. Rectifico. Ya ha pasado. Sudece casi cada año y ha vuelto a suceder este.
No, el que aspira al Nobel tiene las mismas posibilidades de obtenerlo como el que no aspira a él. Vamos a ver: blank
¿Sobre qué bases le otorgan el Nobel a Barack Obama? Si es por ser presidente de la nación que rige al mundo, las intenciones a obtener la paz, por el color de su piel o la euforia que su aparición pública ha causado en el mundo, podrían otorgárselo igualmente a Lisa Simpson.
Me caen bien los dos: Lisa y Barry, quizás mejor la amarilla que el negro, porque tengo cierto recelo frente a los políticos sean del color que sean. Lisa es una cerebrito que se parece un poco a mí cuando niño aunque la dictadura comunista cubana había lavado mi cerebro a esa edad; lo cual no han podido hacer con Lisa.
Barack Obama es un ejemplo a seguir. Tengo un poster con su cara en mi escritorio porque me recuerda que los sueños imposibles no lo son tanto y que hay mucho que se puede hacer en el mundo para que las cosas vayan bien.
Pero seamos sinceros, Barry no ha hecho NADA, ABSOLUTAMENTE NADA por ganar el premio Nobel. Ha tenido muy buenas intenciones por la paz en el mundo, pero sólo eso: intenciones. Incluso ha tenido la decencia de reconocer que no lo merecía. Y no creo que sea sólo humildad.
Ahora bien. Si extraño es que se lo den a un representante del establishment (ya lo habían hecho antes con Roosevelt, Wilson y Carter) más raro es que se lo otorguen a alguien que su máximo mérito es pedir el perdón para los asesinos de su familia, que es muy loable, pero no es suficiente para el Nobel; bueno se lo dieron a Rigoberta Menchú por ello.
Y la parte más extravagante es cuando se otorga en literatura. ¿Se hace por méritos literarios? No, porque Vargas Llosa ha estado nominado todos los años. ¿Se otorga por abogar por la paz? No, porque Vargas Llosa ha estado nominado todos los años. ¿Se otorga por enfrentarse a dictaduras? No, porque Vargas Llosa ha estado nominado todos los años. Un despropósito.
No sé, pero parece más que evidente que a la Academia sueca le tiran los lados izquierdos. No hay otra explicación.
Ya que estamos en estos lares y despropósitos podríamos otorgar la condición de Miss Universo a Marge Simpson. Estamos en el buen camino pues ya aparece en la portada de la revista Playboy. Por lo menos sería más sensato.

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